15 dic 2015

Divino pecado de chocolate...

Buenos días,

Se acercan las fiestas navideñas... bueno no, hace como un mes que ya es Navidad en las calles, comercios, etc... y o bien nos invade un hermoso sentimiento de amor y fraternidad, o bien nos estresa la presión de la fiebre consumista... 

Sea lo que fuere, la receta que os traigo hoy es una dosis deliciosa de salud y equilibrio mental, vaya, un "quitapenas".

El Divino pecado de chocolate es una mousse en forma de tarta con base de galletas Oreo, aunque como digo siempre, la gracia y la creatividad la pone cada cuál adaptándola a sus gustos o a lo que tenga por casa. 

La veo más para una merienda o como postre después de una comida ligerita, ya que es muy cremosa y cada bocado invita a saborearla con paciencia y atención. Y es que el frío es una época fantástica para disfrutar del chocolate en todas sus variedades. Las personas con intolerancia al gluten, podrían prescindir de la base de galletas, o bien usar unas que no lo contengan.

Esta joya es una adaptación de la receta de la Mousse de Chocolate de Rachel Khoo. Me gustó tanto la textura y la sencillez con la que estaba hecha, que quise hacer una tarta con ella.


Bueno, no me enrollo más, os dejo con la receta y espero que os guste:


Ingredientes: (para tarta de 24 cm de diámetro. Aproximadamente 8-10 comensales) 

Para la base:
  • 200-220 grs. de galletas Oreo (Las originales, aunque también se pueden usar tipo Digestive, María...)
  • 70 grs. de mantequilla
Para la mousse de chocolate:
  • 3 yemas de huevo (reservamos las claras para hacer el merengue)
  • 50 grs. de azúcar integral de caña
  • 20 grs. de Maizena o harina refinada de maíz
  • 250 ml. de leche (yo usé leche evaporada)
  • 1 cucharada sopera colmada de cacao puro en polvo (tipo Valor)

Para el merengue de chocolate:
  • 3 claras de huevo que habíamos reservado
  • 50 grs. de azúcar integral de caña (se podría sustituir por sirope de ágave)
  • 2 ó 3 gotas de zumo de limón
  • 1 pellizco de sal marina fina
  • 150 grs. de chocolate negro troceado (mínimo del 70%)
  • 200 ml. de nata para montar al 35% MG (que esté bien fría)


Para la presentación:
  • 3-4 galletas Oreo
  • Chocolate negro rallado o gotas de chocolate

Preparación:
  1. Es importante dejar preparados todos los ingredientes antes de ponernos manos a la obra, así será más sencillo y nos cundirá más el tiempo.

  2. Comenzamos con la base de galletas: En una picadora, o bien a mano, tritura las galletas hasta conseguir una mezcla arenosa, no muy fina, ya que queremos que después se note la textura. Mientras, derrite la mantequilla al baño María o bien al microondas, en la opción de descongelar, a intervalos de 30 segundos para evitar que se queme. Prepara un molde desmontable de 24 cm con papel sulfurizado para la base (una recomendación es poner un acetato alrededor de las paredes del molde, ya que la tarta cuaja en la nevera y al contacto con el metal, el color de los bordes puede afearse un poco... No altera el sabor ni la textura, pero es más bonito a la vista)

  3. En el mismo molde, echa las galletas trituradas y a continuación la mantequilla derretida y mezcla ambos ingredientes hasta que se integren bien. Reparte la mezcla por toda la base apretando bien para que quede firme (yo me ayudo de la base de una cuchara para aplanar la base y así dejarla igualada) Reserva en la nevera.

  4. En un bol, mezcla las yemas de huevo con el azúcar y la Maizena. Pon a hervir la leche en un cazo con la cucharada de cacao puro y mezcla para evitar que se enganche al fondo del recipiente. Cuando rompa a hervir, añade la leche con cacao a la mezcla de huevos, azúcar y Maizena removiendo sin parar para que los huevos no cuajen (no queremos hacer una tortilla...) ponlo todo de nuevo al fuego removiendo sin parar con unas varillas hasta conseguir una textura de crema pastelera, es decir, espesa y sin grumos. (Por eso es importantísimo que no dejes de remover hasta que apagues el fuego, ya que si no, se apelmazará y es posible que se te queme, echando a perder parte del trabajo) Pasa la crema pastelera de chocolate a un bol y tápala con plástico film de manera que éste toque la superficie de la crema para que no se reseque ni le entre aire. Los profesionales le llaman "a piel" a esta técnica culinaria. Cuando haya enfriado un poquito, guárdala en la nevera unas 2 ó 3 horas... 

  5. Pasado el tiempo de reposo de la crema pastelera, pásala a un bol grande y con las varillas bátela para que se ablande un poco y así integrar y mezclar mejor el resto de ingredientes.

  6. Derrite los 150 grs. de chocolate negro al Baño María o al microondas, siguiendo los mismos pasos que con la mantequilla. Una vez derretido, añádelo a la crema pastelera batida y mezcla de nuevo para integrarlo bien. 

  7. En un bol limpio y sin restos de grasa, echa la mitad de las claras que tenías reservadas y añade el azúcar, las gotas de limón y el pellizco de sal. Cuando comiencen a blanquear añade el resto de las claras y móntalas hasta que queden bien firmes a punto de nieve (sabrás que están listas cuando creen picos y al girar el recipiente no se caigan)

  8. Monta la nata, bien fría, hasta que quede cremosa. No la queremos muy dura, ya que si no, la textura de la mousse no es tan ligera. Y recuerda que si te pasas con el batido, harás mantequilla....

  9. Ahora mezcla, con movimientos envolventes para que no se baje, las claras y la nata montadas con la crema pastelera de chocolate. Reparte la mezcla sobre la base de galletas. Te puedes ayudar de una espátula o la base de una cuchara para darle forma de espiral a la superficie de la mousse, o bien dejarla bien lisa e igualada. Eso a tu gusto!!!

  10. Para terminar la presentación, ralla un poco de chocolate negro por a superficie y coloca a tu gusto unas cuantas galletas Oreo o las que hayas escogido para que se sepa de qué es la base. El último paso es reservar en la nevera un mínimo de 4 ó 5 horas, pero yo la dejé toda la noche y cuajó de maravilla. Diría que incluso estaba más buena porque los sabores se habían asentado más.



Ya veis qué cremosa es y además está riquísima. Así que si estas fiestas queréis hacer un regalo para amantes del chocolate, con esta receta os los meteréis en el bolsillo.


P.D.: No comparto la fiebre consumista, pero me gusta la Navidad, así que si no coincidimos por aquí en estos días, os deseo unas felices fiestas y mucha luz para el 2016.

Gracias por vuestro tiempo y un abrazo grande!!!


14 sept 2015

Tarta Selva Negra

Buenos días,

Comienza el nuevo curso escolar, y para endulzar la vuelta al trajín con los niños y las extraescolares hasta horas intempestivas..., os traigo esta tarta deliciosa y con un poquito de chispa para ratos de paz y descanso.

El pasado sábado día 12 de septiembre, mi suegra, Conchi, cumplió 62 años. Aunque siempre hago yo las tartas para los cumpleaños, pensé que también es un buen regalo, no? 
Cuando haces una tarta para regalar, regalas tu tiempo, tu cariño a la hora de elegir el sabor, que los ingredientes sean lo más naturales posibles, pensar en los gustos de la persona a la que va dirigida... Pienso que es un magnífico regalo. Y yo puedo dar gracias porque siempre recibo agradecimiento y cariño en todas las que hago, por muy rústicas o sencillas que éstas puedan ser. 

Esta vez me apetecía una tarta con chocolate. Normalmente tiro más hacia las básicas porque es acierto seguro, pero mirando entre el recetario de repostería del libro de la Thermomix, dudé si hacer una Sacher (de la que ya tenéis la receta aquí), pero finalmente me gustó el aspecto de la Selva Negra por combinar cacao y nata y alcanzar una buena altura una vez montada. Ya la había preparado bastante tiempo atrás, pero no para un cumpleaños.

La Selva Negra es de origen alemán y debe su nombre a una zona geográfica del norte de Alemania que se caracteriza por la densidad de sus bosques. 

La receta que yo consulté, además de llevar entre sus ingredientes el famoso Kirsch (licor de cerezas silvestres del área de la Selva Negra en Alemania), también incorporaba cerezas, pero en este caso, al no ser temporada y no gustarnos el sabor de las cerezas confitadas que venden en los supermercados, opté por no ponerle y sustituirlas por una mermelada de frutos del bosque.

Por cierto, esta vez las fotos son mías... creo que se nota que no han sido tomadas por Edu..., pero monté la tarta un rato antes de irnos y no daba tiempo a montar el chiringuito para retratarla como Dios manda. 

Estoy contenta del resultado!!! A ver qué os parece a vosotros...


Por cierto, la masa la hice en la Thermomix, y la nata la monté con las varillas eléctricas, pero se puede hacer todo a mano, sólo que lleva algo más de tiempo y hacer brazos, ya que los huevos hay que blanquearlos y esponjarlos muy bien con el azúcar. Eso es garantía de que el bizcocho os quede esponjoso y suba bien.

Con las cantidades que indico, yo hice dos bizcochos iguales, ya que en el horno, esta masa no sube mucho y la tarta queda más bonita si tiene altura.

Ingredientes: (para tarta de 24 cm de diámetro. Aproximadamente 10 comensales) 

Para el bizcocho:
  • 6 huevos a temperatura ambiente (yo recomiendo los del número 1 ó del 0...)
  • 300 grs. de azúcar (yo lo uso integral de caña o panela)
  • 1 pellizco de sal marina
  • 200 grs. de mantequilla pomada (a temperatura ambiente)
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla 
  • 200 grs. de harina (yo uso harina de espelta integral)
  • 80 grs. de cacao puro en polvo (sin azúcar-tipo Valor)
  • 1 sobre levadura química o impulsor (tipo Royal, aunque últimamente uso una de origen Bio que compro en una tienda especializada "Veritas", pero también los hay en herbolarios y tiendas de dietética y alimentación natural)
  • 80 grs. de Kirsch
Para el relleno y cobertura:
  • Mermelada de frutos del bosque o cerezas (si haces esta tarta en temporada de cerezas, deshuésalas y macéralas un par de horas en Kirsch para luego añadirlas al relleno de la tarta)
  • 600 grs. nata para montar muy fría (mín. 35% MG) (creo que con 500 grs. es más que suficiente, porque a mi me sobró nata montada que ahora tengo en el congelador)
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • 2 sobres de estabilizante de nata (opcional, pero ayuda a que se mantenga firme por más tiempo. Lo compro en supermercados Lidl o Aldi)
  • 100 grs. de azúcar glass u otro endulzante (tipo Sirope de Ágave, que es muy dulce, pero mucho más sano que el azúcar refinado
  • Virutas de chocolate negro para decorar
Preparación:
  1. Es importante dejar preparados todos los ingredientes antes de ponernos manos a la obra, así será más sencillo y no tendremos que perder tiempo durante la receta.
  2. Comenzamos con los bizcochos en Thermomix (TM 31): prepara dos moldes de 24 cm con papel sulfurizado para la base y mantequilla y harina para las paredes. (Si no dispones de dos moldes iguales, primero haces un bizcocho, y luego el otro... Tardarás más, pero te saldrán iguales. Lo que sí puedes hacer es preparar toda la masa de una vez y luego hacer mitad y mitad)
  3. Mezcla en un bol la harina, el cacao puro, el pellizco de sal y el impulsor (al usar harina integral, no acostumbro a tamizarla, pero si utilizas harina normal, tamiza todos los ingredientes para que no queden grumos y la mezcla se airee bien) Reserva.
  4. Coloca la mariposa en el vaso de la Thermomix. Añade los huevos junto al azúcar y la esencia de vainilla. Programa 5 minutos, 37º, Vel. 3 1/2. Una vez haya pasado el tiempo, vuelve a programar, sin temperatura, otros 4 minutos, Vel. 3
  5. Añade la mantequilla y la mezcla de harina y cacao que tenías reservada. Programa 4 segundos, Vel. 1. Saca la mariposa y acaba de mezclar con una lengua o espátula con movimientos envolventes para que no se baje la mezcla.
  6. Añade el licor Kirsch e intégralo a la mezcla con movimientos envolventes.
  7. Con el horno ya precalentado a 180º, reparte la mezcla a partes iguales en los moldes engrasados y hornea entre 25 ó 30 minutos, o hasta que al pinchar con un palillo o cuchillo en el centro, éste salga limpio. Una vez horneados, saca a una rejilla y déjalos enfriar por completo (Cada horno es un mundo, ya lo sabes ¿verdad? En el mío, aunque tiene aire, preferí hacer los bizcochos uno a uno... Ya sé que tardo más, pero tengo la garantía de que los dos son iguales y controlo mejor la cocción... De todos modos, yo pongo calor abajo + aire; si el tuyo no tiene aire, pon calor abajo y la bandeja a media altura para evitar que se queme el bizcocho) TRUCO: Si no quieres hacerlo todo en el mismo día porque vas just@ de tiempo, prepara y hornea los bizcochos el día antes y los guardas en la nevera envueltos en plástico film para que no se sequen. Al día siguiente sólo tienes que montar la nata y hacer el montaje de la tarta.
  8. Relleno: Aunque también se puede montar nata con la Thermo, controlo mejor el proceso a mano o con unas varillas eléctricas, como fue el caso. En un bol, incorpora la nata bien fría junto a la esencia de vainilla y el estabilizante (si decides usarlo). Comienza a batir a baja potencia para que no salpique demasiado y cuando la mezcla comience a estar cremosa, añade el endulzante elegido y vuelve a mezclar a media potencia hasta que la textura sea de nata firme. (Ojo con pasarte!! la nata es muy puñetera, y cuando te quieres dar cuenta, pasas de tener nata montada a mantequilla... ¡¡¡Ni se te ocurra tirarla si te pasa eso...!!! te dejo este post de El Comidista para saber qué hacer con ella)
  9. Montaje: Coloca una de las bases de bizcocho en el plato o soporte que hayas elegido con la parte de abajo mirando hacia arriba (la más plana). Extiende la mermelada de frutos del bosque o cerezas por toda la superficie. Encima de ésta, extiende una capa generosa de nata montada y ralla unas virutas de chocolate negro por encima.
  10. Unta con la mermelada la otra base por la cara plana, y colócala encima de la anterior (quedará como un sandwich. Ésta última base, la que va arriba, no va al revés como la otra, sino que la forma más redondeada queda mirando hacia arriba, tal y como sale del molde... Aixx, espero explicarme bien porque no tengo fotos que ayuden a ilustrarlo mejor) 
  11. Pinta la parte superior del bizcocho con más mermelada y finalmente cubre la tarta con nata. Procura que los laterales de la tarta también queden cubiertos por la nata, y que la parte superior sea generosa con ella para darle volumen y gracia. 
  12. Por último, ralla más virutas de chocolate negro por encima y guarda en la nevera para que la nata se mantenga bien firme.
  13. Si le pones cerezas, entre los pasos 9 y 10, es cuando hay que ponerlas entre los bizcochos para que aparezcan mezcladas con la nata.




Sin ser muy complicada, el resultado es bonito y el sabor es extraordinario. Además me permite darle un acabado rústico, ya que me gustan más las tartas con un aspecto artesanal.
Aunque el corte no se vea, os aseguro que quedó precioso y salieron unos trozos bien completos. 

Como siempre, te animo a que la hagas y me cuentes qué te ha parecido o qué toque personal le darías tú.

Muchas gracias por tu tiempo y un abrazo grande!!!

Hasta la próxima!!!!




1 jul 2015

Mousse ligera de lima limón


Buenos días!!!

Dimos la bienvenida al verano hace sólo unos días, y se siente tan orgulloso, que se está haciendo notar a base de bien...

Venga, que para variar, hacía mucho que no os dejaba una recetilla y esta es bien fácil, refrescante y veraniega.

No es una mousse propiamente dicha, pero la textura es muy similar y sólo te llevará 5 minutos de tu tiempo y tener 4 ingredientes en casa. ¿A que de entrada pinta bien? Pues el resultado es genial!!

Vamos con la receta!!

Ingredientes (Para 6-8 personas. Dependerá de los vasitos o recipientes que uses)
  • 150 grs. de galletas tipo Digestive (yo las utilizo de avena)
  • 4 yogures naturales (que sean cremosos y sin azúcar ni endulcorantes artificiales. Servirían tipo Griego. Yo uso los de La Fageda por su cremosidad. Evitar desnatados, ya que tienen una textura más gelatinosa) 
  • 375 grs. de leche condensada (el bote pequeño de La Lechera, pero sirve cualquier marca, incluso las desnatadas)
  • 100 ml de zumo de limón y lima (unos 3 limones y 1 lima) 


Preparación 
  1. Tritura las galletas hasta conseguir una textura arenosa. Si no tienes picadora, mételas en una bolsa de congelación con cierre hermético, quítale el aire, y con un rodillo o una botella, vas rodando hasta que tomen la textura deseada. Resérvalas.
  2. Lava muy bien los limones y la lima, ya que necesitarás la piel para la decoración final.
  3. Añade los ingredientes a un bol (excepto las galletas), y mézclalos hasta conseguir una textura homogénea (para que quede una textura fina, cuela el zumo de limón y lima previamente. Conserva las cáscaras para la presentación). Puedes mezclarlos con varillas manuales, con una batidora, o con la Thermomix, que son sólo 30 segundos en velocidad 5.

Montaje 

Aquí entra en juego tu imaginación, pero yo te doy una idea de presentación que en casa ha gustado mucho. Se trata de ir intercalando capas de galleta y mousse, así cuando te lo vayas a comer, siempre encontrarás los dos ingredientes a la vez.


Cuando llegues al borde del recipiente, ralla la piel de los limones y la lima que usaste para el zumo (evita la parte blanca, ya que amarga y podría estropear la receta)


Y ya tienes la mousse lista!! ¿A qué es sencilla? Déjala reposar en la nevera al menos un par de horas, para que tome una textura más esponjosa. 



Un postre sencillo y fresquito que se hace en un momento y puedes tener en la nevera dos o tres días. Además, de un día para el otro, se integran mejor los sabores, y está más buena aún.
No te gusta con galletas, pues no las pones y estará riquísima igual. 
¿Se puede hacer con yogur de soja? Se puede, pero entonces debes cambiar el endulzante y revisar las cantidades, ya que la leche condensada es de origen animal. En el siguiente enlace puedes ver cómo se hace leche condensada vegana, es muy interesante. Si no, hay establecimientos de alimentación bio y vegana donde puedes comprarla con una base de leche de soja.
Otra opción es añadir dos yogures más a la receta y endulzarla con miel, sirope de arce o ágave, o bien melazas. El azúcar no lo recomiendo porque cuesta de diluir y dejaría una textura granulosa en boca.
A partir de aquí, hazlo cómo tú veas y más te guste. La gracia de la cocina es que todo está inventado, pero cada cuál pone su toque personal.

Muchas gracias por tu visita, espero que te guste!! 

Un abrazo enorme y hasta pronto!!!



20 dic 2014

Pa de pessic o Bizcocho Genovés

Hola de nuevo!!


A punto de coger vacaciones... hoy vengo con otra receta dulce, un Pa de pessic, como lo llamamos en Catalunya, conocido generalmente como Bizcocho Genovés, es decir, huevos, azúcar y harina, poco o nada más... 
Se caracteriza por tener una miga densa y esponjosa aún no llevando nada de levadura; el secreto está en batir durante un buen rato los huevos junto al azúcar.

Tanto si acompaña el desayuno, como un buen chocolate caliente para merendar, es un bizcocho 10, te lo comerías a pellizcos, probablemente de ahí le venga el nombre... Además sirve como base de muchas tartas, ya que se puede emborrachar con almíbar, licor, o rellenarlo con mermeladas, trufa, nata, lemon curd o el dulce que se prefiera. 

Esta misma base ya la he usado en otras recetas como el Bizcocho a las tres leches, los Piononos al ron y alguna que haré más adelante para recetas saladas... Sí, sí, en salado también está increíble!

*Veréis muchas recetas donde os piden que la harina sea especial de repostería... yo no la veo necesaria, y os hablo por mi experiencia. Mis bizcochos están preparados con harinas integrales de trigo, espelta... y me quedan muy tiernos. 
El que os presento hoy está hecho con harina integral de trigo y aunque su textura es más rústica, os aseguro que queda muy muy esponjoso. Hoy día encontraréis harinas de todo tipo y a granel (Ecológicas, blancas, semi-integrales, integrales, de espelta, de Kamut, de trigo sarraceno, de maíz, de centeno...) La oferta es variadísima y nos permite jugar con los sabores y las texturas, a la vez que hace accesibles muchas recetas a personas con intolerancias alimentarias.

Bueno, vamos con la receta. Tomad nota...

Ingredientes (Para 4-6 personas. Molde de 20 cm diámetro)
  • 4 huevos (a temperatura ambiente)
  • 120 grs. de azúcar integral de caña 
  • 120 grs. harina (yo la uso integral de trigo o espelta)*
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla o azúcar vainillado 
  • 1 pellizco de sal (siempre uso sal marina fina)
  • mantequilla o aceite y harina para engrasar el molde 

Preparación Manual (preparaos para hacer brazos... jajaja!!)
  1. (Si la vainilla es en esencia o pasta, añadirla al principio, antes de batir los huevos con el azúcar. Si es azúcar vainillado, incorporarlo junto a la harina)
  2. Precalentar el horno a 170ºC (si tiene aire, calor abajo + ventilador; si es convencional, calor arriba y abajo)
  3. En un bol, batir los cuatro huevos junto al azúcar hasta que esponjen y doblen su volumen (calculad unos 15 minutos batiendo...)
  4. Añadir la harina y el pellizco de sal, poco a poco, a través de un tamiz o colador para que no se baje la mezcla y remover con movimientos envolventes hasta que quede integrada.
  5. Engrasar el molde o poner en la base de éste una hoja de papel sulfurizado (de horno). Incorporar la masa del bizcocho y hornear a media altura durante 25-30 minutos aproximadamente. (Sabréis que está listo si al pinchar con un cuchillo o brocheta, éste sale limpio de masa. Si no, dejadlo en el horno en periodos de 5 en 5 minutos hasta que esté hecho)
  6. Sacar y dejar enfriar sobre una rejilla.
  7. Disfrutar!!!
Preparación en Thermomix TM31
  1. (Si la vainilla es en esencia o pasta, añadirla al principio, antes de batir los huevos con el azúcar. Si es azúcar vainillado, incorporarlo junto a la harina)
  2. Precalentar el horno a 170ºC (si tiene aire, calor abajo + ventilador; si es convencional, calor arriba y abajo)
  3. Colocar la mariposa en el vaso de le Thermomix e incorporar los huevos y el azúcar. Tapar y batir 6 minutos, 37º C, Vel. 3,5
  4. Acabado el tiempo, repetir la operación sin temperatura.
  5. Incorporar la harina tamizada junto al pellizco de sal. Mezclar 10 segundos, vel. 2,5. Retirar la mariposa y acabar de mezclar con una lengua o espátula con movimientos envolventes.
  6. Engrasar el molde o poner en la base de éste una hoja de papel sulfurizado (de horno). Incorporar la masa del bizcocho (se puede espolvorear con azúcar antes de entrar al horno, yo le pongo azúcar integral) y hornear a media altura durante 25-30 minutos aproximadamente. (Sabréis que está listo si al pinchar con un cuchillo o brocheta, éste sale limpio de masa. Si no, dejadlo en el horno en periodos de 5 en 5 minutos hasta que esté hecho)
  7. Sacar y dejar enfriar sobre una rejilla.
  8. Disfrutar!!!

Se pueden hacer variantes, al gusto del consumidor... Por ejemplo, se le puede añadir canela, ralladura de limón o naranja, un chorrito de licor, lo que prefiráis.

Lo mejor de este bizcocho es que es de aquellos que, si dispones de unas buenas varillas eléctricas o un robot que te haga la faena de batir, lo haces en un momento y te saca del apuro si se te presenta gente a merendar.

Vosotros elegís, como siempre digo, lo hecho en casa y con ingredientes de calidad y proximidad, es un regalo para los sentidos.

Gracias por dedicarme otro ratito... 

Aprovecho para felicitaros las fiestas. Que tengáis una Navidad y un 2015 lleno de abundancia.


Un abrazo y que seáis muy felices!!!




20 oct 2014

Crumble de manzana y pera

Buenos días familia!!!

Comenzamos otra semana de otoño con un postre inglés a base de fruta, harina, azúcar, mantequilla y algún ingrediente extra... 
Es muy sencillo y además se puede tomar frío o en caliente.


Realmente son dos recetas en una, ya que por un lado he preparado una compota de manzana y pera que podríamos acompañar con yoghurt o bien sobre una tostada con mantequilla en el desayuno, y por otro la base de unas galletas de mantequilla básicas.

Las personas intolerantes al huevo pueden tomarlo, pero no las celíacas, ya que lleva harina y avena. No obstante, se podrían sustituir por harina de trigo sarraceno, que sí es apta.

Recordad que cuanto más de proximidad sean los ingredientes que usemos, más saludables y más garantías tendremos sobre su origen y manipulación. Yo particularmente, uso ingredientes de origen bio o ecológicos...


Bien, vamos con la receta??

Ingredientes (Para 6-8 personas)
  • 2 manzanas (tipo golden o reineta)
  • 2 peras (tipo conferencia)
  • 100 grs. de azúcar integral de caña (más dos cucharadas para la compota)
  • 1 palo de canela o 1 cucharadita en polvo 
  • 2 cucharadas de agua
  • 150 grs. de harina integral
  • 50 grs. de copos de avena
  • 100 grs. de mantequilla (mejor fría)
  • 1 pellizco de sal (siempre uso sal marina fina)
  • 1 chorrito de ron (opcional, pero le da chispa a la receta)

Preparación 
  1. Comenzamos con la masa de nuestro crumble: Añadimos a un bol el azúcar, la harina, la avena, la mantequilla troceada y un pellizco de sal. Sin amasar, muy importante, pues no queremos una bola de masa, vamos pellizcando los ingredientes con los dedos para que se integren entre sí formando una textura arenosa. (Si veis que la masa queda muy húmeda y no se suelta bien, añadid otra cucharada de harina, ha de quedar suelta) Tapadla con film y dejadla reposar en la nevera mientras preparáis la compota.
  2. Seguimos con la compota pelando y troceando a cubos las peras y las manzanas. En un cazo incorporamos la fruta, las dos cucharadas de azúcar integral, el palo de canela o la canela en polvo, y las dos cucharadas de agua. Llevamos a ebullición, tapamos y bajamos el fuego para que se hagan poco a poco (yo las tengo al 4-5 durante 35 minutos aproximadamente y de vez en cuando, remuevo con una cuchara de palo para romper un poco la fruta) Con el fuego ya apagado, añadir un chorrito de ron a la compota y remover.
  3. Precalentar el horno a 180ºC (si tiene aire, calor abajo + ventilador; si es convencional, calor arriba y abajo)
  4. Se puede presentar de varias maneras, yo lo he montado en una fuente de horno, pero también se puede hornear en recipientes individuales para flan. En la base de la fuente o la flanera se coloca la compota de fruta (sin el palo de canela), y se cubre con la masa de crumble. Hornear durante 30 minutos aproximadamente a media altura.
  5. Se sirve calentito en copas o tazones con una bola de helado del sabor que prefiráis (yo se la pondría de canela, vainilla o mojito...) También se puede tomar frío, pero os recomiendo que lo saquéis un ratito antes de la nevera para apreciar bien los sabores.
  6. A mi me quedaron algunos trozos de masa gruesos, NO PASA NADA, una vez horneados quedarán más crujientes, tipo galleta, y en boca junto a la compota, es una mezcla deliciosa.
Si queréis hacer más masa, podéis aprovechar para hacer unas ricas galletas para la merienda ;)

Bueno, disfrutad de este rico postre, que como veis, es bien sencillo, y si no, preguntádselo a mi gatita Marruixa... jajajaja!!!

Fotos de Eduard Rodoreda
Que seáis muy felices!!! 

Un besote y hasta la próxima!!!!



17 jul 2014

Bizcocho integral de chufa. Receta de aprovechamiento

Hola a tod@s!!!

Ahora sí que sí, el calor ha llegado y lo que apetece son bebidas fresquitas que nos quiten la sed. Así que me he animado a hacer horchata en casa, ecológica, fresquita, sin conservantes, y el resultado nos ha dejado más que contentos... 


¿Y cómo se hace horchata en casa? 1L de agua filtrada, 200 grs. de chufas remojadas de 12 a 24 horas, 80 grs. de azúcar integral de caña, 2 minutitos en la Thermomix a máxima potencia o con una buena batidora, colar en estameña o gasa, enfriar un par de horitas en la nevera, y a disfrutar!!! (Receta extraída del libro de recetas gratuíto de Chufamix.es)

Recetas de horchata tenéis montones en la red, pero pensé qué hacer con la pulpa de la chufa una vez triturada y colada, y decidí que podría usarla en un bizcocho. 

Tiene una textura similar al coco deshidratado, y aunque a nivel de sabor no predomina demasiado una vez horneado el bizcocho, sí que nos beneficiamos de las propiedades de la chufa gracias a sus minerales, ácido oleico, vitaminas E y C y pocas calorías. 
Es una joya, y eso que yo no soy muy horchatera... 

Además la chufa, incluso teniendo certificación ecológica, es muy económica, ya que 1kg cuesta entre 5€ u 8€ dependiendo del proveedor, y para 1L de horchata sólo se usan 200 grs. ¿Qué os piden por 1L de horchata artesanal en una heladería...? Evidentemente hablo de horchata fresca y natural, no la que se vende en el súper...

Textura chufa triturada y colada

Pero vamos con la receta, que es muy sencillita de hacer y creo que os va a gustar:



Ingredientes (Para 1 bizcocho de 24 cm de diámetro (8-10 personas))
  • 3 huevos frescos a temperatura ambiente
  • 150 grs. de azúcar integral de caña
  • 1 yogur natural o de limón (puede ser vegetal, es decir, sin leche animal)
  • 50 ml de aceite de girasol (también puede ser de oliva, pero el sabor será más potente)
  • 170 grs. de harina integral
  • 1 sobre de levadura o impulsor (yo lo compro biológico y sin gluten en tiendas de productos ecológicos o herbolarios) En su defecto, 2 cucharaditas de bicarbonato sódico.
  • 1 pellizco de sal
  • 1 cucharadita de canela en polvo (opcional, pero es que a mí me encanta...)
  • 100 grs. de pulpa de chufa (la que os sobre de la horchata, la guardáis en una bolsa zip y al congelador, ya que es muy delicada y se estropea con facilidad)
  • Ralladura de 1 limón (sólo la parte amarilla. Y si no es ecológico, bien lavado con agua y bicarbonato)

Preparación 
  1. Precalentar el horno a 180ºC (si tiene aire, calor abajo + ventilador; si es convencional, calor arriba y abajo)
  2. Batir los huevos junto al azúcar hasta que blanqueen (yo lo hice con unas varillas de mano, pero se pueden usar varillas eléctricas o robot de cocina)
  3. Incorporar el yogur, el aceite, la canela y la ralladura de limón. Mezclar unos segundos
  4. Añadir la harina junto al impulsor y el pellizco de sal. Mezclar hasta que quede una masa homogénea.
  5. Por último, añadir la pulpa de la chufa y volver a mezclar todo hasta tener una mezcla uniforme y sin grumos.
  6. Engrasar el molde con un poco de aceite y espolvorear con harina para que sea más fácil desmoldar. Echar la mezcla y hornear durante 30 ó 35 minutos. Sabremos que está hecho si pinchamos con una brocheta o cuchillo, y éste sale limpio. (Si vemos que se está dorando demasiado por arriba, bajar la temperatura a 170º o tapar con un papel de horno o de aluminio)
  7. Dejar enfriar sobre una rejilla, desmoldar y servir con un buen vaso de horchata fresquita.
Se me ocurre, que como la chufa no tiene gluten, en lugar de usar harina integral normal, se podría sustituir por trigo sarraceno o fajol. Así tendríamos un dulce apto para personas con celiaquía.

Espero que os animéis a hacer esta receta de aprovechamiento. Eso sí, os recuerdo que la pulpa caduca muy rápido ya que es un producto fresco, así que o la congeláis para próximas preparaciones, o la dejáis en la nevera un máximo de 48 horas.


Muchas gracias por tu visita y hasta pronto!!!

UN ABRAZO Y SALUD!